martes, 24 de marzo de 2009
Con dos camas vacias
Responsabilidad. La palabra que más nos repiten.
No dejan de decirnos que seamos responsables de nuestros actos, nuestros actitudes o nuestro comportamiento. Responsabilizate.
Pero no es fácil. Hacerse responsable requiere muchas cosas. Perderte el ver un partido por la tele, quedar con determinada gente o hacer cosas que no te apetece hacer. Pero sobre todo requiere madurez y estabilidad.
Madurar duele... y mucho. Madurar es crecer, dejar de jugar, empezar a tener preocupaciones. En definitiva ser responsable.
No quiero ser responsable. No me gusta la palabra responsabilidad. No es fácil ser responsable. Pero es lo que toca, hay que crecer.
HAciendome responsable poquito a poco
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poquito a poquito, como dice siempre facto delafé, las cosas no se atragantan...
ResponderEliminarPodriamos no ser responsables nunca, y vivir sin pensar en qué repercute lo que hacemos, a quien dañamos...pero eso sería lo más egoista...
Hazlo por tí, por mí, y por todos los que te rodean. Es díficil, nadie dijo que no lo fuera, pero es un paso necesario...
Nos vemos este viernes pequeño!